El nuevo oasis caraqueño: El Parque Simón Bolívar
El Parque Simón Bolívar tiene un sin fin de posibilidades para disfrutar en familia o con amigos. Esta es la historia detrás del nuevo oasis caraqueño.
Los parques caraqueños forman parte esencial de la ciudad, de alguna manera se han acoplado a la actividad urbana y ahora es muy difícil pensar una ciudad sin sus parques. El Ávila siempre será nuestro parque natural predilecto, pero en la ciudad existen muchos más que tienen la característica de ser construidos por el hombre o no, tales como Los Caobos, el Parque del Este, del Oeste y Los Chorros. Los antes descritos han quedado grabados en nuestra memoria colectiva e individual ¿Quién no recuerda haber visitado el parque del este cuando estaba pequeño o de asombrarse con las obras de arte que están en el parque Los Caobos? Pero, con el tiempo estos parques han excedido su capacidad, además que Caracas junto a sus ciudadanos exigen nuevos espacios de recreación adaptados a nuevos conceptos que permitan integrar el arte, la cultura y la naturaleza en un nuevo gran recinto.
Bajo esta necesidad varios entes comienzan la planificación y desarrollo de un nuevo parque; uno donde él caraqueño pueda identificarse con él y al mismo tiempo ofrecerle más alternativas para vivir la ciudad. Así es como nace el proyecto parque Simón Bolívar, ubicado en el área este de la base aérea La Carlota, al sur del parque del este. A primera vista pareciera ser un anexo del parque del este, pero cuando vemos más a fondo el concepto cambia para darnos algo nuevo y dinámico. El proyecto completo contempla la reestructuración de la base aérea La Carlota para convertirla en un parque de carácter monumental de 105 hectáreas, que incluirá Canchas, áreas deportivas, zonas educativas, tecnológicas y culturales, además de grandes áreas verdes.
Actualmente el proyecto está en su primera fase, donde lo primero que se visualiza al llegar a su acceso por el sur del parque del este, es un gran puente que atraviesa la autopista francisco fajardo de norte a sur. Al cruzar el puente se tiene una espectacular vista de la esfera de soto, además entre las sorpresas está una ventana en el centro del puente que permite caminar sobre el trafico de la autopista 
, pero no te preocupes que la misma está enrejada y es segura. El acceso peatonal para personas mayores y con discapacidad no es un problema porque el puente cuenta con grandes rampas de fácil acceso.
Finalmente, al entrar al parque nos recibe una avioneta que oculta un dulce secreto en su interior. Un poco más adentro una torre de control nos invita a tomar café en su terraza y descubrir otra vista de la esfera de caracas, junto a ella están los parques infantiles y máquinas de ejercicio. Aunque lo más impresionante es su laguna que hace las veces de espejo de agua, reflejando sobre sí a nuestro Ávila. Otra cosa importante de resaltar es la vista que se puede tener del paisaje caraqueño, la mayoría de los edificios al norte desaparecen y nos permiten ver una ciudad más natural. Hay miles de formas de disfrutar este parque.
Solamente puedo darte detalles del que será el nuevo parque caraqueño, si quieres saber más acércate y ¡conócelo!